Metz 2-3 PSG: El París de Emery ni se lo cree

El PSG salió siendo el dueño del encuentro en el Saint-Symphorien. El Metz fue bastante irreconocible, con caras nuevas y descansos para los más habituales como Didillon, Falette o Jouffre. Los de Hinschberger aprovecharon cuando tenían la pelota pero el París de Emery se mostró más sólido y teniendo las primeras ocasiones. Lucas Moura fue de los más activos en la primera mitad, e incluso el brasileño pudo marcar, pero escogió ceder la pelota y no encontrar dueño. Pasada la media hora, el PSG se soltó la melena y sentenció el choque. En una buena contra llevada por Maxwell, éste metió un centro preciso a la cabeza de Cavani que acabó dentro. Minutos después, otro pase al espacio de Maxwell fue cazado por Matuidi que cruzó al primer palo de Kawashima para poner el 0-2. Con esa cómoda ventaja, el París se fue tranquilo al descanso.

En la segunda parte, el Metz le puso más dificultad al PSG pero aún así los de Emery tocaron cómodos en campo contrario. De hecho, el técnico vasco dio descanso a Di María poco después de comenzar los últimos 45′ para dar entrada a Pastore. A partir de ahí, el París fue a más y pudo sentenciar el encuentro; sin embargo, una falta al borde del área crearía tensión. Jouffre se encargó de lanzar y se la clavó a Trapp por su palo para recortar distancias. Con la entrada de Diabaté, Sarr o Jouffre, el Metz se lo empezó de creer. De hecho, una acción de Sarr por la izquierda acabó en pies de Diabaté que sentenció ganando el pulso a Meunier. El Symphorien estallaba en un partido que daban por perdido. De hecho, Jouffre envió una falta al larguero en el descuento. Hubiera sido antológico. Con el 2-2 quedaban tres minutos. Un barullo en el área acabó en un centro de Pastore para Matuidi que cabeceó a gol para hacer el 2-3. Histórico y agónico final e injusto para un Metz que dio todo. El PSG salva un partido que pudo ser la estocada y olvidarse casi del título.