Comienza la pelea por el ascenso. Arranca la Ligue 2

La segunda división francesa abre hoy sus puertas. Cómo viene pasando en las categorías de plata de otras grandes ligas, la igualdad de antemano parece máxima. Y en Francia no iba a ser distinto. No encontramos un favorito claro cómo en las últimas ediciones, si no que hay un abanico importante de siete u ocho equipos que se pueden considerar favoritos para el ascenso. Por abajo también se espera bastante igualdad ya que dos de los recién ascendidos van a presentar proyectos ambiciosos. Esa ausencia de favoritos unida a los play-offs previos a la promoción harán que nada llegue decidido al final.

Entre los favoritos quizá los dos que presenten el proyecto más sólido sean Metz y Auxerre. Les grenats recién descendidos han apostado por Antonetti para el banquillo, que ya ascendió al ASSE, y han conseguido mantener a Cohade, Dossevi y Riviere, además de fichar a Oukidja, Gakpa y Sunzu. Mientras en Auxerre tras seis años en Ligue 2 ven con optimismo esta temporada. La llegada de Correa en la segunda parte de la temporada pasada hizo que el AJA estuviera en números de ascenso y con la llegada de jugadores experimentados de primera les hace ser ambiciosos. Otro proyecto ambicioso es el del Lens. Montanier al mando del mayor presupuesto y la afición más numerosa y un equipo bien reforzado en todas las posiciones. Leca, Centonze y Ambrose deben dar el salto de calidad a un equipo que será el que más presión tenga. Un poco a la expectativa están equipos cómo el Le Havre. Han tenido bajas duras e importantes cómo Mateta, Guitane o la más que probable de Moukoudi. Pero Bazile, Mayembo y Kadewere son sustitutos de garantía. Otro que jugó los play-offs la temporada pasada fue el Brest y en Finisterre mantienen el bloque. Larsonneur, Pi, Weber y Charbonnier seguirán de columna vertebral y se unen Pintor, Ayasse y N’Goma. En Lorient el proyecto es radicalmente distinto a la temporada pasada pero el objetivo es el mismo. Se fueron Bouanga y Guendouzi, y Landreau optó por cantera y fichajes de perfil bajo. Sainati y dos revelaciones de National son los fichajes que deben ayudar a Lemoine, Courtet o Cabot. El Troyes recién descendido es otro equipo que cambió demasiado, aunque mantienen calidad con Nivet, Pelé o Confais pero notará las bajas de Walter, Hérelle y Grandsir.

Después de estos equipos hay proyectos buenos pero con cambios radicales. El ejemplo más claro es el Sochaux. Bajo la dirección del Alavés el mítico club del Bonal ha cambiado todo. El español Aira dirigirá desde el banquillo un proyecto que debe empezar bien para convencer a la afición que desconfía bastante. Demirovic es el fichaje estrella y de su adaptación dependerá el futuro del club.  Después clubs cómo Valenciennes, Ajaccio o Nancy están a la búsqueda de un proyecto sólido.

Por la parte baja el ascendido Béziers parte cómo la cenicienta de la competición. Luego equipos cómo Niort, Gazélec, Clermont o Orléans no dan arrancado con un proyecto más ambicioso y pueden caer a las zonas peligrosas.