‘Los delanteros ganan partidos y los defensas campeonatos’. Aquella frase dicha por Mendoza en el siglo pasado no pasó inadvertida para nadie. Esa frase cambió en parte la hegemonía que ejercía la nobleza (En este caso la delantera) sobre los campesinos (Los defensas) en la pirámide futbolera. Los delanteros son los alumnos que sacan buenas notas y no son rebeldes. Seres que no se meten en líos, que nunca van a los botellones y que tienen buena fama por su elegancia. Por su parte, el defensa es el humillado. El que se traga todos los castigos, el que lucha contra la dictadura noble y que si hay que morir por el amigo lo hace. Saca malas notas, no estudia y es un rebelde caracterizado por su mentalidad imberbe.

En el fútbol, el delantero es ese tipo de jugador que nunca baja a defender, que se limita más a echar broncas que a picar al defensa rival, o que incluso, se permite el lujo de no luchar por determinados balones en función a sus posibilidades. Ellos, en vez de arriesgar, aguantan y aguantan. Sólo se acotan a marcar gol. Si ellos fallan una ocasión muy clara, no van a lamentarlo. Lo van a lamentar pero saben que su ocasión va a llegar al cabo de unos minutos. En contraste con el delantero, el defensa siempre es un jugador que no destaca por sus cualidades técnicas. Es el que termina el partido lleno de barro, el que más suda e incluso, el que más sangre derrocha. Para el público, si un defensa tiene un error abismal, le da igual que haya jugado perfecto los 89 minutos restantes.  Ese error lo va a llevar consigo durante mucho tiempo. ¿Es injusto? Probablemente sí, pero el fútbol no entiende de justicia.

Francia, un país que en parte si entiende de justicia desde los tiempos de la Revolución francesa. Además de haber sido referencia en expandir sus ideales liberales, puede presumir de tener un ploretariado muy amplio y joven. Jugadores bisoños que ya tienen un peso en la élite mundial y que son un alivio para una selección que desde la inverosímil aislamiento de Thuram a causa de un cáncer que ha tenido copiosos problemas para erradicar un dolor de cabeza. En 2010, se buscó como solución ubicar a Abidal pasó a ser central. Francia se quedaba sin centrales de perfil izquierdo. En la Eurocopa de 2012 tuvo que acudir a un veterano Mèxes para que el déficit defensivo no fuera tan dañino. A la tercera parece que va la vencida. La explosión de una manada de centrales franceses ha permitido que Francia cope actualmente uno de los lugares más amplios en este sentido, ya que a los jóvenes se les unen veteranos como Éric Abidal, Adil Rami, Laurent Koscielny o Sakho, que pese a sus 24 años lleva ya varios años degustando al público francés con sus galones. Aquí van varios de dichos centrales que seguramente estén en la Eurocopa de 2016 que se celebrará precisamente en el país galo.

1) Raphäel Varane

Zinedine Zidane lo recomendó, lo fichó por diez millones y antes de debutar ya tuvo los enjuicios negativos de la afición de Concha Espina. Varane salió del Lens como un central muy simple. Seguramente el 90% de los madridistas desconocían su existencia, es más, tras ver del equipo que procedía, que acababa de descender a la Ligue 2, las críticas se aumentaban para mal. Pero los que se atrevían a viturearlo, tuvieron que callarse ante el titán defensivo.

Raphäel Varane se ganó el cariño de la afición del Bernabéu con tan sólo 19 años, algo que sólo estaba al alcance de Raúl o Guti en las últimas temporadas en las que el Real Madrid veía como su proyecto de rejuvenecer al equipo no triunfaba. Varane se consagró ante el considerado mejor jugador de la historia, ante Leo Messi. La eliminatoria de semifinales de la Copa del Rey de la temporada pasada ya está catalogada como una de las más vándalas de los últimos años por un jugador joven. Además, su gol en la vuelta del Camp Nou consagran definitivamente al defensa francés. Después, Varane llegó incluso a ganarle la titularidad a Pepe, palabras mayores para un imberbe que estaba vigilado con lupa por los expertos. En medio de tanto revuelo llegó su debut, ante España, en un partido de máxima exigencia y que pese a la derrota, pasó el examen con nota.

El punto fuerte de Varane, además de su velocidad, son las coberturas. Hay pocos centrales que lean de manera tan virtuosa el juego del rival. Eso, añadido a una serenidad fastuosa con la que asume cada partido, sea cual sea el calibre, hacen de Varane un central muy completo. Pese a las lesiones que le han mantenido alejado durante mucho tiempo en los últimos meses, Francia no tiene a un central tan completo, de ahí que Deschamps confíe siempre en él, antes que en Mathieu o Abidal, por ejemplo, con muchos más minutos por delante pero sin su lectura de juego.

2) Elaquim Mangala:

Mangala llegó al fútbol belga como delantero. La talluda competencia acentuada en la cantera del Standard motivaron su cambio de posición. Pasar de ser noble (Como indicábamos al principio del artículo) a ploretario es como pasar de tener el Iphone 5S a un  Samsung Galaxy Mini, por poner un ejemplo. Mangala tuvo problemas al principio, pero en apenas año y medio, experimentó un cambio de físico brutal que conllevaron un contrato profesional con el club. Antes, ya había peleado por la titularidad en aquel Standar campeón de la Jupiler en 2008.  Su físico se imponía a la calidad de los rivales.

La ascendente progresión de Elaquim provocaron que el Porto, uno de los equipos más laureados del fútbol portugués, se anticiparán a varios grandes de Europa por su fichaje. En Portugal, desde el día uno, no dos ni tres, desde el primer día ha sido una pieza clave para el equipo. El fútbol portugués además, no destaca por su saliente físico, es más, en la liga portuguesa no hay muchos jugadores como Mangala. De ahí que su superioridad haya sido atronadora y que no haya dejado oposición a los demás defensas que han intentado hacerle frente, pero han sucumbido ante el huracán francés. Ha ganado dos ligas en dos años siendo un pilar para Fonseca.

Mangala ha sido tan superior en Portugal que Didier Deschamps se ha visto obligado a llamarlo para la selección francesa. Tiene la ventaja de que es zurdo, y que en las inferiores francesas apenas aparezcan centrales de su corte, lo que acentúa aún en mayor masa su convocatoria. Mangala destaca por su físico, por su potencia y corpulencia y por tener un juego aéreo dominador, tanto en su propio área como en la del rival. Junto a Varane son los dos centrales llamados a marcar una época en el fútbol francés.

3) Kurt Zouma:

Kurt Zouma representa actualmente el tipo de central que necesita Francia. Ha sido capitán en todas las categorías inferiores desde la sub16, ha sido capitán del Saint Étienne con 19 años, y el Chelsea ya lo ha fichado para la próxima temporada. La vida la está yendo muy rápida, o quizás precipitado. Llamarlo como queráis, pero Zouma ya se ha coronado como uno de los mejores defensas de la Ligue 1 tras N’Koulou y Thiago Silva, siendo de los cinco más jóvenes del campeonato.

El problema para Zouma en relación a la selección es que ya hemos citado a dos centrales que parece que le sacan un año de ventaja. Mientras Zouma ni tan siquiera ha participado en competición europea ni ha ganado una liga (Sólo una Coupe de la Ligue con el Saint Étienne y sin ser titular indiscutible), mientras que Varane y Mangala ya han ganado la liga y tienen una nómina de partidos importante por detrás en competiciones occidentales.

La ventaja de Zouma respecto a Varane y Mangala es que la próxima temporada jugará en la Premier, una liga ideal, y además lo hará en uno de los mejores equipos de allí. Es un central similar a Mangala, pero él es diestro. Físico en el que predomina su feroz juego aéreo y un fornido cuerpo son características idóneas para definir a Zouma. Ya ha sido capitán tanto en el club con más ligas de Francia como en las inferiores francesas. El año que viene sabremos donde está su techo en la Premier League.

4) Samuel Umtiti

En tiempos en los que las arcas del Lyon están muy desmembradas, la cantera es la única vía de escape para el equipo de Rodano. Entre una amplia nómina de buenos jugadores como son Grénier, Gonalons, Pléa, Novillo, Lacazette, Ferri la figura de Samuel Umtiti está siendo poco considerada, para ser un central zurdo con una virtuosa proyección.

Umtiti debutó con el Lyon con tan sólo 18 años. La salida de Cris significó un duro varapalo para el club, y sin poder fichar a un recambio para él, optó por la vía rápida. Umtiti dio motivos para soñar a la desilusionada afición del Olympique de Lyon. Garde apostó por él y este respondió con soberbias actuaciones. En las categorías inferiores de Francia, siempre ha formado junto a su compañero Naby Sarr (Que también hay que estar muy pendiente de él de cara el futuro) una de las mejores parejas de centrales del mundo para su posición. Liderazgo, técnica y colocación son las tres cualidades que más le puntualizan. Es muy difícil que Umtiti llegue al nivel de Mangala en el Porto, pero la edad para el juega a favor (20); y además, ya tiene experiencia europea.

5) Aymeric Laporte

La cantera de Lezama es famosa por muchas cosas. Entre ellas, la de aglutinar a jugadores jóvenes en los que predomine su nacionalidad vasca, navarra o de algún lugar cercano. Pasar de un equipo modesto como el Union Agen para irse a España a una de las mejores canteras de España provoca que el cambio sea muy radical.

Laporte es de esos tipos de jugadores que no aparentan la edad que hay en su DNI. Chico tranquilo, sin miedos, sin nervios y con un carácter flemático, sereno, plácido para cualquier entrenador que debe medir el carácter de sus defensas, acostumbrados a ser bestias que necesitan realizar un taclinkg o llenarse de barro para dominar el área. Laporte no es de ese tipo de burros, es más bien un caballo elegante, que cuando roba la pelota lo hace de manera excepcional. Además de ser un defensa medido, posé unas cualidades técnicas maravillosas, heredadas en los últimos años que ha estado en la cantera del club vasco. Su progresión ha sido tal que en el mundial sub20 en el que  Francia se proclamó campeona, Laporte fue junto a Veretout o Pogba una de las piezas fundamentales del equipo, realizando una consagración que le ha llevado a ser indiscutible para Valverde en un Athletic que está en posiciones de Champions League actualmente. Un central que por el corte que tiene, puede ser un beneficio para Deschamps en un futuro no muy lejano.

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