Antoine Griezmann, bajo el recuerdo de Thierry Henry

Griezmann

Barcelona's French forward Antoine Griezmann gestures after a missed opportunity during the UEFA Champions League Group F football match Borussia Dortmund v FC Barcelona in Dortmund, western Germany, on September 17, 2019. (Photo by John MACDOUGALL / AFP) (Photo credit should read JOHN MACDOUGALL/AFP/Getty Images)

Antoine Griezmann está siendo objeto de todas las miradas tras esta crisis que atraviesa el Barcelona. La derrota ante el Granada le ha vuelto a poner en el punto de mira como responsable del ataque catalán, a pesar de que Messi va entrando poco a poco en el once. Atrás queda el fantástico partido que hizo ante el Betis, con dos goles, y luego la goleada ante el Valencia donde estuvo muy participativo. Sin embargo, fuera de casa, el francés está totalmente perdido.

Los 120 millones que costó su fichaje parece que todavía no están siendo rentables para Bartomeu. Las críticas de la afición no están tardando en llegar tras toda la polémica que hubo en su traspaso procedente del Atlético de Madrid. No obstante, todavía necesita minutos de juego, de aclimatación, en un Barcelona que vive por y para Leo Messi. Con Suárez y el argentino, el galo tiene que ocupar la banda que a nadie gusta, la izquierda. Una banda que fue para Thierry Henry cuando llegó al Barça de Rijkaard y luego de Guardiola. El ex del Arsenal tardó un año en adaptarse a esa posición en la que nunca había jugado. En sus tres temporadas, anotó 49 goles y repartió 26 asistencias, convirtiéndose así en el máximo goleador francés del Barça. Por su parte, Griezmann estaba acostumbrado a llevar todo el peso del ataque del Atlético de Madrid, con un delantero que le acompañaba, en un 4-4-2, no en un 4-3-3, y sin duda, tendrá que pensar en adaptarse a esa posición.

A pesar de ello, es innegable la predisposición del francés a obedecer a Ernesto Valverde, a aceptar que Messi es el líder. Pero si no se siente cómodo en el terreno de juego empezará a pensar si ha sido una buena decisión haber dejado el Atlético de Madrid. Si Griezmann sigue sin carburar, el nombre de Neymar tendrá que volver a escucharse en las oficinas del Camp Nou, y más, si el Barcelona no empieza a demostrar que es un serio candidato a llevarse todo esta temporada, como sí lo fue en años anteriores.