Guilavogui guía al ASSE a la Champions League

vía @asseofficiel
Magistral repaso táctico del Saint-Étienne al Mónaco. El conjunto verde, con unos estelares Lemoine, Bayal y Hamouma y sobre todo un descomunal Guilavogui, se llevó el gato al agua en la tarde de hoy tras vencer por 2-0 a un Mónaco que por momentos no existió sobre el campo. James apareció sólo la última media hora, Kurzawa, la gran revelación, tampoco se explayó mucho, Moutinho sustituido al descanso… Quizá el que menos mal jugó fue el joven Isimat-Mirin, que aguantó el tipo defendiendo a Brandao. El Mónaco no había perdido en lo que llevamos de 2014. Una racha de 10 partidos consecutivos sin conocer la derrota se vio frenada hoy en el Geoffroy-Guichard.

ASSE dormirá tercero, esperando a ver qué hará mañana el LOSC Lille, con 48 puntos, recortándole tres a su rival de hoy (segundo con 56), que puede ver esfumadas sus opciones de ganar la Ligue 1 mañana si el PSG derrota al OM. De acabar hoy la temporada, ambos conjuntos jugarían la próxima Champions League (el ASSE entraría en frase previa).
El partido comenzó con dominio local, sin ocasiones claras hasta el cuarto de hora. Lemoine, muy participativo en ataque, engancha una volea desde fuera del área tras un despeje de Carvalho. El balón saldría lamiendo el poste de Subasic. Dos minutos después, el propio Lemoine sí acertaría a batir al croata con el que puede ser considerado mejor gol del Saint-Étienne en lo que llevamos de temporada. Otro despeje, esta vez de Kondogbia, tras un corner llega a Guilavogui fuera del área, que no toca el balón y apantalla a un jugador del Mónaco ya que ve que Lemoine se acerca para chutar. Su semi volea de primeras desde 25 metros entra por toda la escuadra. Tercer gol de Lemoine vestido de verde, segundo de la temporada. 1-0 y prácticamente todo el partido por delante.

Continuó atacando el ASSE y no se vió que el Mónaco crease excesivo peligro, James Rodríguez pasó desapercibido en la primera parte, al igual que su compañero Kurzawa, revelación del equipo del principado. Su primera ocasión clara llegó en el 35’ tras un error del capitán Perrin en banda izquierda. Germain roba y en el momento que se dispone a tirar, el central verde corrige su error y evita el tiro. Cinco minutos después, el Mónaco gozaría de una triple ocasión, la más clara que tuvo en todo el partido. Un centro desde la derecha es desviado a corner en última instancia por Bayal Sall. Tras el saque, Kondogbia lo intenta con un Ruffier en el suelo con un centro chut raso, pero nadie acierta a rematar. Finalmente, un disparo de Isimat-Mirin bate a Ruffier pero es despejado justo en línea de gol por el autor del gol Stephanois Lemoine. La reacción de les verts no tardaría en llegar. En la siguiente jugada, ya en área monegasca, Brandao cede para el chico de las canas, que con su tiro cruzado obligó a que Subasic se luciese, evitando el primer doblete del jugador bretón como profesional.
Con ese resultado llegaríamos al descanso. Mejor el Saint-Étienne en la primera mitad. Dos cambios hizo Ranieri en el entretiempo. Moutinho y Martial dejaron su puesto a Dirar y Ocampos.
Un remate de cabeza de Guilavogui chapado por Subasic fue la primera ocasión de este segundo tiempo. Preludio de otra doble tentativa de los jugadores hoy vestidos de gris. Ruffier se ganó su sueldo con una parada a tiro de Germain desde fuera del área primero y un mano a mano de James después. Tras esta doble ocasión, quizás parecía que el partido iba a ser un asedio del Mónaco en busca de la victoria, pero nada más lejos de la realidad. No tendrían más ocasiones manifiestas. En cambio, los locales buscarían un segundo gol que les diese relativa calma, sin olvidar que contra el otro “rico” de la competición, el PSG, empataron tras ir venciendo 2-0. El primero en intentarlo en el segundo periodo fue Tabanou, cuyo disparo de falta directa desde treinta metros acabó fuera a la hora de partido. En el 67’ llegaría el ansiado 2-0. Hamouma, con una jugada estratosférica, doblaría la ventaja. El franco-argelino, con el balón en propio campo, se va de dos jugadores monegascos por velocidad. Ya en campo contrario, recorte rápido a Kurzawa y caño a Toulalan. Al partir desde la derecha, se planta en el borde del área perfilado para la zurda, su disparo no es muy bueno pero Subasic debió pensar que tan bonita cabalgada merecía acabar en gol y puso de su parte. Se la comió el croata y 2-0 en el electrónico. A pesar de hacer una buena parada a Lemoine en la primera parte, no anda muy fino Danijel. Otro error suyo supuso el 2-2 la pasada jornada frente al Stade de Reims. Ya con el partido cuesta arriba para el Mónaco, fue cuando apareció James en escena, pero sus filtros de zurda no encontraron rematador. El Mónaco pasó a tener la posesión, pero sin finalizar. A 10 minutos para el final llegaría la última del partido. Contragolpe verde, Brandao centra desde la izquierda para un Bayal Sall que se incorporó al ataque. Su golpeo de primeras fue al travesaño, pero la jugada estaba invalidada al estar el senegalés fuera de juego.

Final del partido y los puntos se quedaron en casa. La clave del partido tiene nombre y apellido. Josuha Guilavogui ha demostrado que si ya es internacional absoluto no es casualidad. En la primera parte supimos que Joao Moutinho jugó porque lo anunciaron por megafonía antes del inicio, ya que el portugués estuvo anulado en todo momento por el pivote francoguineano. No es descabellado pensar que si Guilavogui no hubiese emigrado a orillas del Manzanares, el ASSE tendría un puñado de puntos más. Jeremy Clément no es ningún fenómeno técnico, pero es un hombre que sabe cual es su función y la hace perfectamente. Guilavogui le da otro aire en la posición de pivote, presiona, roba, distribuye fácil, al igual que su compañero, pero es el típico jugador que aporta músculo en esa posición, subiendo y bajando, y con muy buen criterio a la hora de elegir la jugada. Lo mejor, es que pueden jugar juntos (como han hecho hoy) sin estorbarse. Por ponerle un punto negro, es que quizás esta sea la posición de jugador de campo más ingrata (excluyendo portería). El “trabajo sucio” como suele denominarse, suele pasar desapercibido, y a veces no se le da la importancia necesaria. Aun así, Josuha está opositando a la lista de Deschamps, y recordándoles a los aficionados del Atlético de Madrid que vean sus partidos el jugadorazo que se llevaron.
FICHA DEL PARTIDO
AS Saint-Étienne (4-3-3): Ruffier – Clerc, Sall, Perrin, Tremoulinas – Guilavogui (Cohade), Clément, Lemoine (Zouma) – Hamouma, Tabanou, Brandao.
AS Mónaco (4-3-2-1): Subasic – Fabinho, Isimat-Mirin, Carvalho, Kurzawa – Toulalan, Joao Moutinho (Dirar), Kondogbia – James – Germain (Berbatov), Martial (Ocampos)
Goles: 1-0 17’ Lemoine, 2-0 67’ Hamouma
Árbitro: C. Turpin. Amarillas a Clerc (23’), Tremoulinas (68’) y Toulalan (88’). Sin Expulsiones