OL 5-1 Montpellier: Un león hambriento anda suelto

Podríamos hacer la crónica más breve y resumida que jamás haya sido escrita y constaría de tan solo una palabra; Gourcuff.

Podríamos rellenar un texto de 4000 palabras exaltando su imagen, hablando de lo que pudo ser y no fue, de lo que prometía y realmente realizo, e incluso de los logros que ha llegado a alcanzar, pero no, no será el caso, nos dedicaremos a contar lo que el partido propiamente a dado de sí, que no es poco precisamente.

Arrancaba la jornada con 14 puntos, aun en puestos de que dan acceso a competición europea pero envuelto en una «melé» de equipos en tierra de nadie, hoy, con buen futbol y sobretodo goles, que al fin y al cabo es el que te da los puntos, ha sabido distanciarse, tanto en el marcador como en la clasificación de un rival herido en su orgullo. Tras tener que disputar el encuentro en Gerland debido a la inundación del Stade de la Mosson, los hoy visitantes llegaban con la satisfacción de ser el único equipo que ha plantado cara al OM de Bielsa, y esperaba poder refrendar su buen momento batiendo también a los de Fournier. Una escuadra que desde su doble tropiezo ante los recién ascendidos Metz y Lens (además de Toulouse), no sabe lo que es caer derrotado, plantando cara a Lille, PSG, Mónaco, hoy Montpellier y dando la sensación de que hoy por hoy puede hacerle frente a cualquiera (de hecho así lo está demostrando).

Partido bronco y con mucho parón durante su primera media hora, casualidad o no, hasta el despertar del siempre renqueante Gourcuff, por 5ª temporada consecutiva a conseguido que los que seguimos sus encuentros, podamos decir que ha vuelto, al igual que en el resto de temporadas anteriores, ha dado el recital necesario para que pensemos que vuelve a ser el que pudo y no quiso ser, o quizá la fortuna no le dejo. El caso es que una vez más su futbol vistoso, su elegancia y visión ha sido el deleite de los más de 35000 aficionados que se han dado cita en Gerland. Tras cazar un balón en el área, previa filigrana de Lacazette, consiguió enviarlo al fondo de la red. Corría el minuto 38, era su segundo partido consecutivo como titular, y tras ser vital en la victoria por 3-0 frente al Lille con dos asistencias, hoy constataba su buen estado con un tanto, cifra que doblaría tras el descanso. No anotaba desde enero, mes en el que disputo dos jornadas consecutivas por última vez, hoy era el día de romper rachas negativas, y de qué manera iba a hacerlo… Tan solo dos minutos después, y tras una bonita asistencia de nuevo del 10, Fekir define de maravilla, batiendo por alto a Jourdren. Minuto 38, Gourcuff dirigiendo una orquesta en un festival de buen futbol mientras los jugadores del Montpellier no podían asimilar el vendaval que se les venía encima.

Tras el descanso, los visitantes movieron ficha, realizando una doble sustitución, en pos de intentar cambiar el resultado, pero a los 2 minutos, una internada de Jallet sirvió para que, tras llegar a línea de fondo, colocase el balón en el punto de penalti, donde esperaba el protagonista de la noche para acomodar el cuerpo y enviar el esférico junto a la base del poste, imposible para el meta. Era el tercero, segundo en su cuenta particular, no anotaba un doblete desde hace cinco años (29 de Agosto en un Girondins 4-0 Niza), pero hoy era el día, sí.
En el 54’, un auténtico golazo de Tiéné, de libre directo en la frontal del área, metía en el partido a los suyos, y durante unos minutos cerco el marco de Lopes, pero poco duraría el acoso, ya que en el 68’, la entrada al campo de NJie volvió a ser crucial, desequilibrante, eléctrico y cualquier otro adjetivo que se os ocurra para el joven canterano, quien una vez más revolucionó el encuentro a favor de los suyos, animando a la estrella del equipo a unirse al festín goleador, asistiéndole para que anotará el 4º. Tras su triplete contra el Lille, se acerca peligrosamente al actual goleador de la Ligue 1, Gignac, con quien se las verá el próximo domingo.

Pero ahí no acabaría la cosa, y es que, el sustituto del ovacionado Gourcuff, Malbranque, pensó que había entrado para continuar con el buen trabajo de su compañero, y tras un buen destello de calidad de Alexander Lacazette, se unió a la lista de goleadores anotando un tanto con su pie izquierdo. Era el 5º pero el equipo lo celebró como si del primero se tratase. Un equipo con hambre que ya es cuarto en la clasificación y que acecha con peligro los puestos “champions”, posiblemente es el único rival que pueda hacer peligrar la maravillosa racha del “Loco” y curiosamente será este domingo cuando se crucen sus caminos.

Podríamos volver a resumir todo lo anterior en un Gourcuff y 10 más, pero lo cierto es que no es así. Los de Gerland están enlazando una serie de buenos resultados, buen futbol y por qué no decirlo, la fortuna esta de su lado (esa que le dio la espalda en Rumania), sumados al buen momento que atraviesa su estrella, Lacazette, y el más que posible (y enésimo) regreso del “nuevo zizou”. Bonito encuentro el que nos espera el próximo domingo, en Gerland de nuevo, como antaño, los “Olympiques” cerrarán la 11ª jornada en el partido más atractivo de lo que va de temporada.