PSG 5-0 ASSE: El Saint-Étienne no se presentó al recital de Ibrahimovic

Lo que suele diferenciar a un equipo ganador de un equipo perdedor es que, el primero, hace su juego sea quien sea el rival. El Saint-Étienne de Galtier lleva años siendo uno de los conjuntos con una de las formas de jugar más reconocibles, y al mismo tiempo atractivas, del campeonato. Sin embargo hoy el técnico vert no fue fiel a su filosofía en el Parc des Princes.

Ante un PSG que sigue lejos de su mejor versión en ataque, los del Ródano optaron por jugar a la defensiva, colocándose en una especie de 5-3-2, con Monnet-Paquet de lateral derecho, cuando los parisinos tenían la pelota. Mucho trabajo de todos para cerrar sobre todo la zona central y evitar que Ibrahimovic entrase en contacto con el cuero. En cierto modo funcionó, porque ralentizó el juego de los de Blanc minimizando las ocasiones, pero al mismo tiempo dinamitaba prácticamente cualquier opción de llegar con peligro al área de Sirigu.

Cualquier mérito en el sistema defensivo quedó en nada cuando pasado el minuto 20, Ruffier se confiaba en exceso en una cesión de Clement y se hacía el primero en propia. El resultado no cambió absolutamente el guion, pero aún así el Saint-Étienne dispuso poco después de una ocasión para empatar, cuando Erding enganchaba una buena volea en un balón suelto, a la que Sirigu reaccionó perfectamente para mandar a córner.

El PSG, sin forzar la máquina, controló el tempo y se fue acercando al segundo, hasta que en el 41′ Maxwel ponía un centro medido a la cabeza de Ibrahimovic, que superaba a un blandito Pogba para ponerla lejos del alcance de Ruffier.

El despropósito siguió tras el descanso pese a que Galtier dio entrada a Corgnet y Gradel y volvió a un 4-3-3 más reconocible. De nada sirvió, porque mentalmente les verts ni se habían presentado ni tenían pensando hacerlo. La defensa hizo aguas una vez tras otra, y en apenas diez minutos Ibrahimovic tuvo tres mano a mano con Ruffier: dos acabaron en gol, y el tercero en penalti no pitado del guardameta.

La goleada la redondeó Cavani con un gran disparo lejano que se coló por la escuadra. Al final el PSG levantó el pie ante la pasividad de su rival. Victoria contundente y necesaria del PSG en un partido decepcionante de ASSE.