Serbia 1-1 Francia: Pudo ser peor para los galos

Todo parecía que esta noche el terror creado por el estadio Partizán iba a poder con el buen juego del equipo francés. Sin embargo, no fue el campo, sino los jugadores serbios quienes pusieron en serios aprietos a Francia.
El equipo de Didier Deschamps salió sin ese miedo que podrían causar los aficionados balcánicos debido a la poca entrada que había en el estadio. Con siete novedades en el once de inicio respecto al partido frente a España, en el que sólo permanecían Lloris, Varane, Pogba y Sissoko, los franceses dominaron en todo momento el partido. Debutaba una nueva pareja en la defensa, Mathieu y Varane que quizás pecaron un tanto de inexpertos.
Francia empezó dominando el juego, como es ya habitual. Cabella se mostró muy participativo en la banda izquierda ganándole la partida en varias ocasiones a Ivanovic. En el centro del campo Pogba volvió a su posición natural dejando con mayores responsabilidades defensivas a Cabaye y a Schneiderlin. La defensa empezó funcionando bien, pero más tarde comenzaría a flaquear. El primer gol de la selección francesa llegaría en el minuto 14′ por medio de Pogba que remató un córner enviado por Cabella.
A partir del gol, Francia entregó la pelota a Serbia, que se mostró bastante peligrosa por medio de Tadic, Markovic y Djordjevic, viejo conocido después de jugar en el Nantes. En los últimos instantes de la primera mitad, la posesión siguió aumentado a favor del cuadro «plavi», que únicamente se veía en peligro cuando los galos intentaban montar la contra, que gracias al buen planteamiento defensivo de Advocaat, apenas llegaban a acosar la portería de Stojkovic.
La segunda mitad siguió por los derroteros de la primera. Los serbios tenían la pelota y creaban cada vez más peligro ante la insegura defensa francesa. Digne y Sagna favorecieron las internadas de los laterales serbios y el único que puso orden sería el jugador del Real Madrid Raphaël Varane. Las contras francesas aumentaron el peligro y tanto Pogba como Cabella sí llegaron a rematar sobre la portería serbia sin fortuna. Tras las sustituciones de estos dos jugadores y la entrada también de Benzema por Rémy, el juego galo empezó a decaer y apenas se crearon ocasiones. Esto fue aprovechado por Serbia para venirse arriba, y en el minuto 80, Kolarov, uno de los destacados, puso el empate tras un lanzamiento de falta.
La entrada de Lacazette no fue el revulsivo que se podía esperar, por lo tanto, Deschamps tuvo que echar mano de su desatascador particular, Mathieu Valbuena. Con la puesta en funcionamiento del jugador del Dinamo de Moscú, Francia volvió a tener la pelota en los instantes finales y se vio bastante aguerrida volcándose en busca de la victoria. Sin embargo, Lloris se convertiría en el salvador de su equipo tras una enorme parada ante el remate de Ivanovic .
Con este empate Francia cierra estos dos partidos con buenas sensaciones. El siguiente encuentro les enfrentará a Portugal el próximo día 11 de octubre en Saint-Denis.