Toulouse 1-1 PSG: Empate que no deja a nadie contento

Pocos calificativos se le pueden poner a los primeros 25 minutos del PSG. Los de Blanc se vieron superados por el Toulouse, que no solo le discutió la posesión, sino que creó mucho más peligro: en ese punto de partido, siete tiros de los de Casanova por ninguno de los visitantes. Ya avisó Ben Yedder nada más empezar, rematando completamente solo un centro de Regattin.

El gol no se haría esperar. El propio Ben Yedder aprovechó una mala cesión de Aurier para regatear a Sirigu y abrir el luminoso. A partir de ahí el PSG navegó sin rumbo, con tremenda dificultades en la salida de balón y sin ideas cuando lograba llegar a tres cuartos de campo. Sirigu en dos ocasiones y Pesic, que falló a puerta vacía, evitaron que la ventaja se ampliase.

Pasada la media hora Verratti sirvió rápido una falta en el centro del campo, poniendo un balón milimétrico al desmarque de Bahebeck, que empataba en la primera ocasión de los parisinos. El gol dio un respiro a los de Blanc, que se quitaron un poco de encima a los locales, pero sin crear peligro arriba.

Tras el paso por los vestuarios no cambió el escenario del encuentro, con un Toulouse que se veía capaz de jugarle de tú a tú al PSG. Sin embargo, a diferencia de la primera mitad los de Casanova no estuvieron tan inspirados en las inmediaciones del área parisina, apenas creando ocasiones.

A 20′ del final Blanc decidió hacer un triple cambio, dando entrada a Lucas, Motta y Chantome por Cavani, Verratti y Cabaye. El Toulouse pareció empezar a dar por bueno el empate, y a partir de ahí la posesión se empezó a decantar para el conjunto capitalino, que sin embargo no sabía materializarla en peligro ante la sólida zaga local.

El partido acabó con dominio parisino y algún intento tímido de contra por parte del Toulouse, pero nadie logró mover el marcador. Al final reparto de puntos que no deja a nadie contento: los de Casanova, porque saben que han perdido una ocasión de oro para superar al PSG; los capitalinos, porque empatan otra vez y se empiezan a alejar de la cabeza.