Veteranía para un recién ascendido

Rémy Vercoutré y Julien Féret son dos de los estandartes del proyecto del SM Caen de cara a la Ligue 1. El recién ascendido a la máxima categoría del fútbol francés necesitaba jugadores con su dilatada experiencia para intentar amoldar a un equipo que no está viviendo actualmente una situación idónea en cuanto al tema económico se refiere. Tanto el portero del Lyon como el media punta del Rennes han llegado gratis, por lo que si atendemos al Caen por nombres y edad, es un aumento considerable de cara a afrontar su retorno a la Ligue 1

Rémy Vercoutre es quizás, uno de los porteros con más títulos en su haber sin haber sido titular a lo largo de su carrera. Canterano del Montpellier, fichó por el equipo de Rodano en 2002. Su fichaje coincidió con la explosión de un joven Coupèt que le relegó a la suplencia desde el primer día. Vercoutre siguió luchando y a pesar de su cesión al Strasburgo en 2004 -Sólo disputó cinco partidos- sus ganas de triunfar en el Lyon seguían intactas. Coupet continuó a lo suyo antes de fichar por el Atlético de Madrid. Pese a su venta, el Lyon fichó a Lloris y el portero nacido en Synthe hace ya 33 años no pudo disfrutar de los minutos deseados en Lyon. Vercoutre aún así, estuvo presente en las siete ligas que consiguió el equipo de 2001 a 2008. Siendo suplente pero siempre erigiéndose como un verdadero profesional. La experiencia y su respeto desde la directiva del club le hicieron por fin, y tras infinitos intentos, asentarse como titular la temporada pasada, tras la venta de Lloris, y además, a un notable nivel. Eso sí, los helados se derriten cuanto más tiempo están al sol y a Vercoutre, le pasó lo mismo con sus huesos. La inactividad con el paso de los años se nota y su ortodoxo método de entrenamiento le llevó a acusar una serie de lesiones que le han privado de rendir a un óptimo nivel durante un largo periodo de tiempo. La irrupción del joven Anthony Lopes, siendo además, canterano, le ha vuelto a relegar al banquillo. La paciencia, como los helados, no es ilimitada, así que el bueno de Rémy pasará también a la historia por ser el último integrante de la plantilla del Lyon de las 7 ligas en abandonar el club. Ahora, en el Caen, no sabemos si será titular o no. Perquis ha cuajado una de las mejores temporadas de su vida y Garande siempre lo ha definido como un portero indiscutible para su proyecto en Ligue 1. Fuera como fuere, Vercoutre siempre será una leyenda, que seguro que aporta más de lo que muchos piensan al Caen.

Por su parte, el media punta que llega desde Bretaña no es para nada, un jugador que se haya olvidado desde fuera de Francia. Ha pasado de ser un abusón a un jugador muy bueno. No ha sido internacional con Francia pero los expertos insinúan que ha sido el gran error de la selección, no incorporar a un jugador de su clase para un equipo que siempre ha abastecido dicha posición con Zidane. La carrera de Féret es curiosa. Disputó más de 60 partidos en el filial del Rennes, pero su falta de físico impidió que debutara con el primer equipo a principios de éste siglo. Cherbourg, Nancy, Reims, Niort y Nancy fueron sus destinos antes de volver a su casa. ¿A qué ninguno de estos equipos les suena demasiado? Quizás el Reims, pero cuando Féret estuvo en el equipo que disputó en su día una final de Champions ante el Real Madrid, estaba en Ligue 2. Siempre pasando por clubes en los que no podía pelear por título alguno en la Galia, y siempre, demostrando ser un futbolista con una calidad suprema, de esos que siempre se identifican a primera vista. Pero el 10 que nunca vende más que el africano con piernas de toro contrastó los primeros diez años del fútbol francés en este siglo. A raíz del Mundial de Sudáfrica, la Ligue 1 se convirtió en una liga más técnica, y en la que Féret por fin, tenía un hueco en un equipo importante. Con Antonetti en el Rennes se convirtió en una pieza clave desde su llegada e incluso, lo aupó aún más tras llegar a la final de la Copa de la Liga de 2013, en el que el equipo bretón tenía la posibilidad de ganar un título tras 41 años de sequía. Aquella final escoció a Féret, quién poco después se vería perjudicado tras la llegada de Montanier, un técnico apostador de los jugadores imberbes y con proyección. Los canteranos Bagayoko y Doucouré explotaron de la mano del ex de la Real Sociedad y devolvieron a la cruda realidad a uno de los diez con más calidad que jamás han pasado por el Stade Rennais, sin exageración alguna. Ahora, en el Caen, en un equipo sin presión, intentará ser el principal baluarte de un equipo con pocas aspiraciones, como por todos los que ha pasado el tímido de Julien a lo largo de su carrera. No será fácil, pues es un conjunto con una media de 27 años en su ataque, y que necesita renovaciones. Pero siempre su experiencia será positiva.

Vercoutre y Féret. Julien y Rémy. Dos franceses con más de 200 partidos entre ambos en la élite del fútbol galo, y que llegan al Caen para devolver la ilusión a un equipo con apuros en las últimas temporadas. Será interesante ver qué rol aportan dos rockeros curtidos en más de mil batallas.