¡Los tres momentos de tensión de Neymar en el vestuario del PSG!

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Las últimas semanas de Neymar en el vestuario han sido verdaderamente duras. Ha tenido que lidiar con un aficionado que le insultó en la final de la Coupe de France, y las posteriores críticas recibidas, incluso por sus compañeros en el PSG. De ellos mismos, el brasileño se quejó de su actitud en esa misma final ante el Stade Rennais. No escuchaban, muchos de ellos estaban perdidos, los mayores daban consejos pero ellos respondían, es decir, no tenían respeto, eran algunas frases que Neymar puso en su boca.  El delantero señaló a dos culpables, Presnel Kimpembe y Alphonse Areola, campeones del mundo este verano con Francia, y que se les habría subido el ego a la cabeza.

Según Le Parisien, el brasileño hace referencia a dos momentos que de vivieron días ante de la final de la Coupe de France. Uno fue en el descanso del partido contra el Nantes, donde el PSG cayó en La Beaujoire. En ese momento, Thomas Tuchel levantó la voz para criticar con dureza a sus jugadores. Palabras consideradas como insultos por algunos futbolistas parisinos. En ese momento, y cuando el alemán se fue del vestuario, Kimpembe, capitán en aquel partido dijo de no escuchar lo que el entrenador les decía y de dar todo en el segundo tiempo. Algo que se puede tomar como una movilización al equipo por parte de su capitán, o bien, como una falta de respeto hacia su entrenador.

El segundo momento de crispación fue en el descanso de la final de la Coupe de France, que como se recuerda, el PSG cayó ante el Rennes en los penaltis. Esa noche, Neymar se dio cuenta de la poca implicación de algunos jóvenes, que se dedicaron a hablar entre ellos y pasar de las indicaciones de Thomas Tuchel.

El altercado de Neymar con Draxler en el vestuario

Después de la derrota ante el Montpellier de la pasada semana, Draxler reprocharía a Neymar ciertas actitudes. Delante del vestuario, el brasileño se encaró con el alemán y le dijo, que quién era él para hablar, que solo daba pases hacia atrás. Ambos futbolistas tuvieron que ser separados por el entrenador y por el director deportivo Antero Henrique.

Por tanto, Neymar ha vuelto para incendiar el vestuario mostrándose como un auténtico líder dentro y fuera del terreno de juego.